Antes de las pirámides, ya transformaban el paisaje para pescar.
El descubrimiento, publicado en la revista Science Advances, fue posible gracias al uso de drones e imágenes satelitales de Google Earth, que permitieron identificar patrones lineales en zigzag a lo largo de los humedales de la zona. Según la arqueóloga Eleanor Harrison-Buck, de la Universidad de New Hampshire, estos canales se extendían por varios kilómetros y fueron fundamentales para canalizar y atrapar peces de agua dulce, como el bagre.
Las excavaciones se llevaron a cabo en el santuario de vida silvestre Crooked Tree, en Belice, donde además de los canales, se encontraron estanques de retención y puntas de lanza con púas, posiblemente utilizadas en técnicas de pesca con lanzas atadas a palos, explicó Marieka Brouwer Burg, coautora del estudio y especialista de la Universidad de Vermont.